Nubes y Anclas

|




Nueve de septiembre

Nubes y Anclas

Las Nubes arrojaron sus Anclas sobre las estatuas ecuestres. Las estatuas que se salvaron huyeron despavoridas. Unas corrieron al bosque, pero cuando quisieron darse cuenta, ya era demasiado tarde, el bosque ardía y el fuego cerraba su círculo sobre ellas. Otras penetraron en el mar, sin pensar que no sabían nadar y se hundieron hasta el fondo. Aún tuvieron tiempo, mientras las iba cubriendo el agua, de ver nubes mecidas suavemente por el viento, terriblemente enojadas y arrojando anclas a diestro y siniestro sobre toda estatua ecuestre que encontraban a su paso.

Se dice por ahí que se esperan más catástrofes semejantes sobre el resto de estatuas. Estatuas de todo pelaje colocadas con tanto primor por tirios y troyanos a lo largo y ancho de este mundo tan singular (y plural a veces, no siempre).

Guardemos esas Anclas de recuerdo durante un tiempo. Luego ya se pensaría en hacer algo de provecho con ellas.
------

Safari fotográfico


















Los Diptongos Bipolares. Apocalypse. El amuleto vacío

|

Presentamos aquí a “Los Diptongos Bipolares”. Un heterónimo como otro cualquiera para poder enredar o jugar con distintos sonidos.

 En "Apocalypse" (título de un texto de W. Bourrougs) por primera vez utilizamos loops programados para armar una minúscula pieza musical con el que se inicia y termina “la cosa” (contrabajo, batería, vientos y órgano). Luego tenemos algunas pistas manipuladas, invirtiendo o estirando los sonidos, un par de pistas de guitarra eléctrica, batería, sonidos de animales… y la voz de W. Bourrougs recitando algunas frases.  

 

 En “El amuleto vacío” (título de un relato de Paul Bowles), utilizamos un breve instrumental inédito de Babelain y armamos otra “pieza” en plan bucle, cambiando el envoltorio cada vez y dejando la misma pista de guitarra solista. Y alguna que otra pista manipulada, claro. También suena un salmoé por ahí, un arpa de boca, etc…
Aquí también contamos con el principio del cuento de Bowles recitado por él mismo para acabar la grabación.




https://mega.nz/#!5w0ghKAa!vkyHIAtAWVt1pLZ_5aXwBSX3Odu2OMLw-IL3n4laUug

Impulsos pasajeros.

|

Once de julio

Impulsos pasajeros

                El Insigne Científico de Moda y el Primer Capataz Mundial llegaron de improviso a la sala. Venían acompañados del Verdugo Certero. El Científico señaló a un hombre que estaba junto a nosotros. Respiramos hondo. El Capataz ordenó al Verdugo que atara al señalado. Luego salieron con él de la sala caminando enérgicamente.

                Tras la arbitraria intervención, silencio absoluto. Los que aún quedamos nos consideramos gente con suerte. ¿Hasta cuándo?


                Sin ninguna explicación lógica, mi compañera y yo, conseguimos escurrirnos a otra sala en un piso inferior. Una sala aséptica, con mobiliario combinando cristal y metal. Allí encontramos, sentados ante sendas mesas de trabajo, a nuestros amigos Blanca y Luis. Nos reciben sorprendidos y nos dicen que en esa sala estamos fuera de peligro. Además, añaden, al Gran Científico se le pasa pronto ese afán de diseccionar e investigar con humanos. Son impulsos pasajeros.


_______

Safari Fotográfico