¿Qué quedará de nosotros?

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¿Qué quedará de nosotros?

¿Qué quedará de nosotros dentro de
pongamos 1000 años?

Pon tú los que quieras
pero no escatimes en tiempo

Podrían pasar diez reencarnaciones más o menos:

Pongamos una como caracol riojano abstemio
otra como geisha gallega en Argentina
otra como ministro del bienestar etíope
otra como pingüino anarquista en cautividad
 empleado de pompas fúnebres de color (negro)
pirómano maníaco depresivo escandinavo
físico nuclear extremeño teñido de rubio platino
hormiga atómica virtual en paro (con currículo excelente)
payaso heterosexual en el  parlamento europeo
bombero albino africano en el infierno…

¿Y qué?

Qué quedará de aquél flacucho
recorriendo calles desiertas
ebrio de inocencia y bruma
con el frio en los huesos
a la búsqueda del sol del amanecer

Fue aquello realidad
o un espejismo provocado
por el anhelo de ser feliz.
Por encontrar al otro
mirándose por dentro

Que quedará de aquella luz
que surgía de las estrellas
en los paraísos salvajes
 las noches ardientes del verano

Mil años no son nada
y sin embargo…



13 comentarios:

babelain dijo...

Mientras no se diga lo contrario, las ilustraciones son de Mavi.

Saludossssssssssss

Milena dijo...

Es como si escuchase tu voz cantando algo así como "Qué quedará de nosotros, mil años no son nada"... en un estribillo... jejeee
... Pues creo que de nosotros no quedará ni la sombra... en todo caso la luz... Ay qué mundo este... esas reencarnaciones no tienen desperdicio, te han salido "niqueladas"... pero mira, me dan que pensar... este mundo sirve para... salir de él...

Y el dibujo de Mavi es como siempre, alucinante de bonito.

Juanjo Mestre dijo...

Me ha recordado una canción que ahora no recuerdo el título de 091. Habrá que vivir un buen puñado de reencarnaciones y para eso hay que estar preparado. Abrazossssss.

javierfuzzy.blogspot.com dijo...

un pequeñísimo paréntesis, eso seremos dentro de mil años, y de mucho menos.
C´est la vie, mon amie.
Saludos,
JdG

Antoni dijo...

Mil años hace que el sol pasa
reconociendo en cada cada casa,
el hijo que acaba de nacer.
Que el monte dibuja perfiles
suaves de pecho de mujer,
que las flores nacen discretas
y las bestias y la luz también.
Mil años para nuestro bien.

Al leer tu poema me acordé de esta preciosa canción de Serrat.

Un saludote.

babelain dijo...

Milena, de momento no he pensado en ponerle música, así que el estribillo se queda en tu imaginación.
Y si, al menos intentemos salir de este mundo con...dignidad.
Gracias.

Saludossssssssss

babelain dijo...

Johnny, no recuerdo esa canción de 091. Yo no estoy preparado ni para vivir esta que me ha tocado; tengo que espabilar urgentemente jejejeje

Saludossssssssssssss

babelain dijo...

Javier, que optimista te veo jejeje ¿De estatua ecuestre nada entonces?

Saludossssssssssss

babelain dijo...

Antoni, no recuerdo esa canción de Serrat. No lo he oído mucho, solo las clásicas.

Saludossssssssssss

Ficus dijo...

Para que en mil años sucedan diez reencarnaciones, es necesario llevar una vida absolutamente sana. Casi mejor 15 o 20, para vivirlas a tope.
Eso, o rogar por una evolución genética en la que nazcamos con dos hígados (uno pa las cervecitas y otro pa los cubatas), cuatro pulmones (pa los habanos y la picadura) y tres corazones jejeje...

Genial relato y maravillosa ilustración bab & Mavi.

Un abrazote.

ned henry dijo...

Esto, junto a alguna cosa más, es de lo mejor que usted ha parido. Besos a Mavi y abrazo y saludossssss para ti Bab!!

babelain dijo...

Ficus, me pido lo de los dos hígados, cuatro pulmones y alguna cosilla por ahí para poder "gestionar" mejor esta vida que nos ha tocado.

Gracias.

Saludossssssssssss

babelain dijo...

Ned, si "usted" lo dice...jejeje

Gracias.

Saludossssssssss

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