Telesforo y Esperanza. Cuento por entregas. 1ª Parte I

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PRIMERA PARTE
(Donde no ocurre nada fuera de lo normal, aparentemente)
I
Hacía fresco aquella madrugada, aunque fuera pleno verano. En su diminuto cuartucho alquilado, Telesforo calentó agua para un té y pensó por un momento en que ocupar aquella mañana del sábado; barajó varias opciones:

  • Pasear por calles desconocidas hasta el agotamiento físico y psíquico
  • Escribir poemas decorativos revolucionarios
  • Inventar algún artefacto que no sirviera para nada excepto para pasar la mañana
  • Esperar. Esperar lo que sea. ¿La fortuna? ¿Un tren? ¿La vejez?
  • Fumar asomado a la ventana y silbar en francés

Lo primero que hizo fue esperar. Como no ocurría nada, ni la fortuna llamaba a su puerta, ni pasaba un tren y tampoco quería esperar tanto tiempo a la vejez porque se aburría mucho, pues se puso a fumar y a silbar en francés. Luego intentó fabricar un artefacto pero no encontró herramientas ni nada de nada, ¡era tan pobre! Al poco rato escribió un poemita decorativo revolucionario que le subió la moral unos quince centímetros y no era para menos, observen (él lo llamaba ¡poema!):

Los floreros no son revolucionarios
las tuercas si
si encuentran un tornillo
¿verdad?
A las tuercas podemos darle una vuelta más
cuando nos dejan
¿verdad?
Aunque a veces tenemos que desandar lo andado
y desenroscarlas un poco
si no, nos encierran en jaulas
cuando no les da por zurrarnos

Sin embargo
un florero no es sospechoso
pasa desapercibido
si no es muy coqueto,
¿verdad?
También está la flor del payaso
esa si es revolucionaria ¡caramba!
Sobre todo cuando se aprieta la perilla
y sale el chorrito de agua
directo al ojo del alcalde
o de la autoridad competente
¿verdad?

(El “¿verdad?” hay que pronunciarlo como lo hacía la gente de antes, como una aseveración, no como una pregunta. Pero eso era antes, cuando la gente tenía cierta enjundia)


Ya por último, sin estar muy satisfecho del poema, se decide a salir a pasear por calles desconocidas, dispuesto a agotar sus reservas físicas y psíquicas. Le quedaban tres cigarrillos y dos cerillas. El cielo estaba despejado. ¿Quién dice que no puede ser un buen fin de semana?

Continuará...

11 comentarios:

babelain dijo...

Cuento ilustrado (por Mavi) por entregas. Son tres partes con cinco apartados cada una (de un folio nada más, no hay que asustarse; con una "estampita" por entrega).

Saludossssssssssssssssssss

jose kortozirkuito dijo...

SEBI
HUY QUE NERVIOS¡¡¡YA NO DUERMO ESPERANDO LA PROXIMA ENTREGA.TIENE BUENA TRAZA ESTE CUENTO,SOBRE TODO LO DE SILVAR Y FUMAR EN FRANCES,¡¡MON DIÓ¡¡¡O COMO SE DIGAE FRANCHUTE
Yo Jose (en minusculas que no soy tan pretencioso como Sebi), Bab, ¿tre has tomado la medicación? que con lo bien que empieza, fijo lo destrozas.
El santo de arriba muy pincho.
Recuerdos a Don Vito y a la peña del fenopático.

Rick dijo...

El dibujo, muy clásico, muy de cuento ilustrado. Las opciones para pasar la mañana muy originales, en cambio. Aunque no entiendo muy bien qué pueda ser eso de poemas "decorativos" revolucionarios.

Luego, al leerlo, me ha gustado. Aunque sigo sin saber en qué consiste lo decorativo. Qué va, es de lo más útil. Y ese "¿verdad?", convertido en pregunta retórica, le da mucha fuerza.

Bueno, pues esperamos la próxima entrega mientras nos quedamos silbando en francés. Aunque... ¿podría ser en inglés? Es que yo en francés ando fatal...



Ficus dijo...

Pues mira, al final el bueno de Telesforo consiguió llevar a hecho las cinco ocupaciones planeadas (excepción hecha, claro esta, del invento por falta de herramientas y monetario).
Totalmente a favor del "¿Verdad?" de nuestros abuelos, en contraposición con el tan manido "Vale" con el que tanta gente acostumbra a apostillar las frases últimamente.
A la espera de esas dos nuevas entregas, dear bab. Y por supuesto, también a la espera de esas nuevas y magistrales ilustraciones a las que nos tiene acostumbrados Mavi.

Un abrazote.

Milena dijo...

De entrada, la acuarela de Mavi preciosa...

En fin, a ver qué pasa con las dos cerillas -menos mal que hay continuación... Telesforo podría encenderse primero dos pitillos, y dejar el tercero para la cerilla restante... no te parece?

Saludotes

Juanjo Mestre dijo...

Si la fortuna no llama a la puerta ni pasa el tren, no viene nada mal hacer un poema como el tuyo inmerso en este gran mini-relato. Abrazossssss.

babelain dijo...

Sebi, es silbar en francés, no fumar en francés, que es más fácil jejeje. La próxima entrega en un par de días, para no agobiar a Jose con tanta letra.

Jose, ya sabes que no tomo la medicación desde hace mucho. me va mejor así (como a ti). ¿Cómo sabes que lo voy a destrozar? Se ve que me vas conociendo. Les daré recuerdos tuyos.

Saludosssssssssssss

babelain dijo...

Rick, pues eso de poemas decorativos revolucionarios podría ser algo algo parecido a una camiseta con la cara del Che.

Mi padre era de La Rioja y utilizaba mucho esa coletillas: ¿Verdad? aseverando más que preguntando.

A Telesforo le pasaría lo mismo que a mi en el bachillerato, que no había muchos alumnos que eligieran inglés como para ponernos un profesor y nos metieron en francés a empujones. Por eso no debe saber silbar en inglés. Lo siento.



Saludosssssssssssssss

babelain dijo...

Milena, gracias de parte de Mavi. Bueno, he conseguido lo que quería, despistar un poco jejeje. Lo de los pitillos y las cerillas no tiene otra misión que despistar. Pero parece importante ¿verdad? (no es una pregunta)

Saludossssssssssssss

babelain dijo...

Ficus, eso si que es verdad, casi consigue las cinco opciones. Ya veo que el ¿verdad? ha calado. Se nota que tenemos cierta edad ¿verdad? jejeje. Sobre todo yo.
Mavi tiene todas las ilustraciones terminadas, si no no hubiera empezado a publicar este cuentecito. Gracias en su nombre.

Saludossssssssssssss

babelain dijo...

Johnny, por eso es bueno tener al menos un plan B. Telesforo tenía cinco, por si las moscas. Gracias.

Saludossssssssssssssssss

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