Operación Intercambio
I
En una especie de inmenso almacén de techos muy altos había varios cientos de personas intentando llegar a un acuerdo para intercambiar entre ellos algo de sus cuerpos: ojos, bocas, dientes, narices, orejas, brazos, pechos, culos, cuellos, piernas, dedos, pelos, hombros…
Me explico: la gente paseaba y buscaba, entre los ocupantes de la sala, algo de otros cuerpos que le llamara la atención y que ellos no poseían y al mismo tiempo ofrecer lo que tenían y no les importaría cambiar.
-Oiga, me gusta su cuello, ¿querría cambiármelo por algo que a usted le interese de mí? Tengo un buen “catálogo” como puede usted ver a simple vista.
-Pues cambiaría mi cuello por sus rodillas, que veo que las tiene en muy buen estado de conservación.
-Bueno, por mis rodillas… ¿no le interesan mis brazos?
-Mmmm… no, prefiero sus rodillas…
Y así pasaron horas y horas de aquel día de intercambio, como en una especie de primer día de rebajas, hasta que muchos de ellos llegaron a un acuerdo.
II
La segunda fase consistía en pedir cita con los cirujanos para poder hacer los cambios oportunos sobre la marcha: “le quito el pié derecho a este y se lo pongo al otro, y enseguida, aprovechando la anestesia…”
III
La tercera fase era la más complicada. Una vez realizadas todas las operaciones, los implicados se reunían de nuevo en la sala un día convenido. Allí casi todos expresaban su descontento:
-Menudo par de orejas me has “colocao” eh, capullo
-Lo elegiste tú, so huevón. Bien que te gustaron cuando las llevaba yo puestas.
Diálogos para todos los gustos, aunque eran pocos los que quedaban satisfechos, pero no había segundas oportunidades, ese era el “contrato” que firmaron al entrar en aquel almacén el día 1 de enero de 2012: -Cada persona solo podía participar una vez en su vida en una “Operación Intercambio”-
IV
La cuarta fase consistía en la Evaluación de la “Iª Operación Intercambio”. Detrás de esta “Operación” se encontraba una famosa clínica de médicos avispados. Estos concluyeron que el evento había sido un éxito pero decidieron anular la tercera fase para nuevas operaciones, ya que casi nadie sabía apreciar sus nuevas adquisiciones, y para colmo, los pacientes no tenían derecho a ningún tipo de reclamación; así que “punto pelota” (como dijo uno de los médicos con cierta guasa mientras encendía un puro para celebrar el éxito de la “Iª Operación Intercambio”)
9 comentarios:
Ilustración de Mavi. ¿Alguien quiere cambiar algo?.
Saludosssssssssss
Qué bueno!!.La ilustración me encanta.
Brutal realto que me recuerda a que nivel de ridiculo ha llegado el ser humano.Inflandose tetas, labios y otros aspectos fisicos.Hay que ser realmente masoka para querer ser anestesiado y operarte de algo que no necesitas.Cambiar algo que es vital,Ok.Pero si naciste feo, te jodes , ya tendras algo que sea de mas valor en ti!
Un abrazo
Ps: Magnifica ilustracon.Triste!
Te juro que solo faltaba a esta decadente sociedad que se pudieran intercambiar partes humanas en las clínicas de dermoestética. Nunca se me había ocurrido, y hoy menos. Abrazosssssss.
Susu, gracias, se lo diré a Mavi. Suerte en el concurso.
Tsi, y aún no hemos alcanzado nuestro tope. Seguro que me he quedado corto; veremos cuando pasen unos años que es lo que se le puede ocurrir al "ser humano" como tú dices.
Johnny, te digo lo mismo que ha Tsi. A mi si se me ocurren cosas de estas de vez en cuando. Todo se andará.
Saludossssssssssssss
Pues estoy pensando siriamente el apuntarme si se celebra un nuevo evento de esas características, ya que viniendo del trabajo esta mañana he visto a un hombre con un par de codos de lo mas apetecible.
Por una vez, y sin que sirva de precedente, estoy de acuerdo con los medico-empresarios avispados en lo de eliminar la tercera fase, y es que "la gente es de un desagradecido que exaspera..."
Un abrazote.
Ficus, ¿tanto has estudiado que tienes los codos gastados? Si que es desagradecida la gente; no tienen compasión con los pobres ricos de la CEOE.
Saludosssssssss
¡Cómo hemos podido llegar a ésto, cuánta superficialidad! A los que se intercambiarían cualquier órgano, yo primero les cambiaría el cerebro, después...
En fin, vaya momento nos está tocando vivir, ¡cuánta pobreza de espíritu! Me alegro que no terminara bien esa "1ª Operación Intercambio". Punto pelota.
Abrazos gigantes.
Paco, imagínate poder intercambiar el cerebro con Eintein, aunque no creo que le interesara el mío jejeje
Mañana publico un nuevo E.P. para celebrar que no tengo puente por el día de Andalucía, además, me toca trabajar también el martes.
Saludosssssssssss
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