Versión "casi" instrumental de The Inner Light (The Beatles. Harrison). Digo casi porque he dejado los coros de una versión anterior que hice con voz.
Para la percusión he utilizado tablas indias de verdad. El sitar lo suplo con la Fender Stratocaster y un
efecto Pitch con rever; la chirimía la hago con un teclado Casio muy antiguo
que tiene la rueda Pitch para variar el tono en cada nota. El
"harmonium" lo hago con un teclado Yamaha "Clavinova”.
El de la túnica naranja es mi queridísmo amigo Marcos en una de sus habituales performances humorísticas.
En el vídeo se repite este autorretrato envejecido (editado en un intento de transformación en árbol centenario; ya queda menos) fundido con otras fotos también de mi cosecha (se nota, no?).
11 comentarios:
Qué maravilla! Nivelazo. ¿Marcos es tu amigo de Tarragona al que fuimos a visitar con el dos caballos? Qué recuerdos!
Muy conseguido ambiente psicodélico, como creo recordar que pregonaba la versión original de Harrison. Se nota que los medios tecnológicos a tu alcance se emplean adecuadamente. Igual ocurre con las imágenes, en las que resaltan las figuras fijas con las contrapuestas, también los tonos suaves. Todo un ejercicio creativo. El arte se comparte.
Codazos a distancia,
Efectivamente, Antonio. A ese Marcos me refiero. Menudo viejecito. Casi no lo contamos. Nos vemos todos los años con Marcos y su mujer, “Here, there and everywhere”, por seguir con The Beatles. Y se agradece el comentario viniendo de un gran versioneador de The Beatles.
Me alegra verte por aquí. A ver si montamos una reunión en algún lugar con Marcos después de la hecatombe esta.
Saludossssssssssssssssss
Gracias, Javier. Uno hace lo que puede con los medios y capacidades (pocas) que tiene. No son los Abbey Road Studios, pero me apaño en mi cuartito con los instrumentos a mi alcance. Y con las fotos, qué quieres que te diga, jugueteo un poco, me divierto. A veces suena la flauta.
Saludosssssssssssssssssss
Que lastima que no fumo, precioso tema para relajarse, algo muy necesario con este maldito aislamiento.
Antonio gracias a la santisima mano de Jose, disfrutamos un fin de semana en Tarragona con el maestro Melendo y el cointreau.Hace algo asi como mas o menos 50 añitos, la hostia, Antonio hace unos pocos de año nos encontramos en Nerja.La versión buahh, muy especial para estos días.
Menos mal que por fin pude publicar mi comentario.Me ha tocado mucho los cojones.Si aparecen dentro de unos dias algunosd comentarios mios, sobre esto es que se han quedado en la famosa "nube"
Hombre, Marcos. Estás hecho un chaval. Ya comentas con soltura y todo jeje. Aunque algunos comentarios se queden en la nube. Allí también están bien. Joer, Melendo, para darle de comer aparte. No recordaba ese encuentro por aquí con Antonio y vosotros. Ahora ya sí. Habrá que organizar otro cuando llegue el virus republicano y se vaya el monárquico.
Saludosssssssssssssss
Claro que sí. Me encantará. Lo necesito. Yo tampoco recordaba el encuentro con Marcos en Nerja Ahora lo entreveo en la niebla del tiempo Si es que los encuentros no pueden ser tan espaciados. No se puede espaciar en el tiempo. Esto suena a física cuántica
Supongo que has querido decir "viajecito"
Si, Antonio, quise decir viajecito. No me había dado cuenta.
Antonio quedamos que te iríamos a ver a Extremadura.Asi que cuando acabe esto, si seguimos como especie, quien sabe, nos plantamos.Nada que viejecito viajecito, nos quedamos con lo último.Un abrazo
Publicar un comentario