(Rene Crevel)
Tiempo al tiempo
He leído por ahí que alguien
“se suicidó en legítima defensa”. Yo no. Yo me suicidé en
defensa de la humanidad (propiamente dicha).
Ahora que caigo, si llego a
saber que podía inventar una frase como esta última, a lo mejor no
me hubiera suicidado. No es que sea gran cosa, pero por algo se
empieza.
A lo que vamos; ¿quién
necesitaba a un tipo como yo, con poca capacidad de sufrimiento y
mucha para disfrutar de la vida? Un tipo que ya solo vivía de las
rentas y no aportaba nada a la sociedad. Alguien que se asomaba
frecuentemente a las ventanas o a los espejos buscando respuestas, o
lo que es peor, milagros. Que traficaba con sombras y recuerdos de la
niñez. Que cantaba muy bajito para que no lo oyera nadie. Que huía
de las tertulias y ansiaba ser invisible, a ser posible, todo el
rato.
¿Quién necesitaba a un tipo
que odiaba los espectáculos en general? Que creía en los
presentimientos de los mirlos, o en el equilibrio de las derrotas, o
en la heroicidad de los gestos inútiles.
Ahora, en esta especie de
limbo, donde también se encuentran ilustres personaje suicidados
como Rene Crevel, Jacques Rigaut, Maupassant, Tralk... me encuentro
en mi salsa. Aunque a algunos aún no se les ha desinflado el
hinchado ego del todo. Pero están en ello y poco a poco hacen como
que notan mi presencia y bajan algunos peldaños de su pedestal.
Algún día podré sentarme
con ellos a tomar un café y, como hablo muy poco, no se notará
mucho que no domino su idioma.
“Por fin sabré quien soy”
parece ser que dijo Borges en su último momento. Yo aún no lo he
descubierto. Tiempo al tiempo.
Así presentaba entonces el
E.P. Donde figuraba esta canción:
El
11 del 11 del 11 a las 11 de la noche es un buen momento para
publicar el último E.P. de Babelain. Un E.P. atípico, con cuatro
canciones y un instrumental. Esta vez no hay versiones.
(Todas
las voces e instrumentos por Babelain. Mavi silba conmigo en "El
Héroe razonable)
El Héroe Razonable
EL HÉROE RAZONABLE
(Letra y Música.- Babelain)
El Héroe razonable
Se ríe de los ciclones
Baila con las estatuas
Salta entre los balcones
En un lecho de porcelana
El fuego helado del amante
Derrite todas las lágrimas
Ya nadie ama como antes
Grita la sangre del viento
Y resquebraja los labios
De las tardes de los bosques
Donde se cobijan los sabios
---
Los jardineros sin rostro
Riegan con miel de azahar
Las bocas de las langostas
Que han desertado del mar
Cerezas de carne y hueso
Reflejan en los espejos
La sonrisa de las flores
Que lloran porque están lejos
La lluvia dibuja sombras
Sobre las piedras dormidas
Y borra viejas historias
Antes de su partida
---
Ya se aleja la tormenta
Aúllan los peces del lago
Las estrellas nos arropan
No sufrimos grandes estragos
En un rincón del verano
Hay una veleta oscura
Señalando hacia la noche
Sin pasar por la locura
El Héroe razonable
Esconde el puño en el bolsillo
Sonríe al rayo de luna
Entre el canto de los grillos